domingo, 20 de mayo de 2007

Soledad.


Solo yo...


Solo yo ante un mundo de incertidumbre
roto tras los pasajes de esta vida,
la culpa fue de nuestras lágrimas
rociadas con el más potente veneno.


Cierro los ojos e intento pensar
en lo que fui, en lo que soy
ahora parece que solo existan cuestas
ya que cada paso

pesa más que el anterior.


El silencio inunda esas noches
en las que la luna no me acompaña
solo la música alivia la soledad
que invade a esta mediocridad.


Víctima de la imperfección, de la insatisfacción
yaciendo desnuda sobre un suelo
invadido de charcos
con pequeños miedos.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Ganar, perder. Jugar a vivir o tomarlo todo como un juego necesario, conveniente, saludable…
La vida es un juego con una primera regla que dice: esto no es un juego sino algo muy serio. -En algún libro debí leer algo así-
Ya no sé que creer, cierro los ojos y los tonos se diluyen en grises, diría que amables.